Siete de cada diez españoles ven con buenos ojos el reconocimiento biométrico para apuntalar la seguridad.
La biometría se ha convertido en la baza perfecta de los expertos en seguridad para acabar con el fraude y los usuarios, cada vez más, la ven como la mejor aliada para proteger su información. Más de 400 millones de consumidores en todo el mundo realizan ya por encima de ocho mil millones de autenticaciones exitosas al año, mientras que casi ocho de cada diez españoles ya se sienten cómodos con la tecnología de biometría.
Un estudio de Nuance recela que los PIN y las famosas contraseñas pierden relevancia en favor de las técnicas de biometría. La irrupción del reconocimiento de iris o el facial y los lectores de huellas digitales en los smartphones de alta gama han elevado la confianza de los usuarios en estos sistemas.
Los usuarios que gestionan cuentas con diferentes claves, experimentan semanalmente un sentimiento de frustración por no acordarse de cómo han usado las mayúsculas o los caracteres especiales. Sin embargo, casi la mitad de los encuestados (un 48%) no se ha puesto en contacto nunca con atención al usuario para resolver estos incidentes.
El número de ciberataques para cometer fraude va en aumento cada año, este hecho ha provocado que cada vez más organizaciones implementan tecnologías de autenticación biométrica (reconocimiento de voz, facial, de huella dactilar o de comportamiento) para permitir que los clientes accedan a sus servicios de manera fácil, segura y sin fricciones. Uno de cada cuatro españoles ha sido víctima de un fraude en el último año.
Creemos que tecnología como la biométrica debe representar el futuro de la autenticación, quitando responsabilidad a PINs y contraseñas inseguros y tediosos, y poniendo énfasis en nuestras características únicas, afirma Brett Beranek, director general de Seguridad de Nuance Enterprise.